Cada vez se siente más lejana la pandemia de aquel 2020 en el que algunas actividades humanas se detuvieron y otras se aceleraron.

En LIDER EJECUTIVO MX hemos dado cuenta de algunos temas que han impactado tanto a las personas como a las empresas:

Comercio electrónico. La aceleración de los procesos comerciales a través de tiendas en línea, métodos de pago más eficientes y procesos de logística cada vez más eficientes.

Social Selling. El uso intensivo de redes sociales para la conexión entre personas para realizar intercambios comerciales tanto de productos como de servicios.

Home Office. Trabajar desde casa o en modalidad híbrida quedó como una nueva realidad.

Inteligencia Artificial. La aparición de herramientas de inteligencia artificial en diversas industrias como la educación, el entretenimiento, la generación de contenidos, incluso la programación y el diseño.

Educación. El desarrollo y maduración de nuevas formas de adquirir conocimiento de manera remota.

Servicios a Domicilio. Cada vez más servicios están siendo utilizados y valorados por el mercado como una alternativa al tráfico intenso de ciudades en crecimiento.

Seguramente los cambios, adopciones y adaptaciones de las actividades humanas seguirán su camino. Nuevamente se confirma que la única constante es el cambio.

Llegaron los Desinfluencers o Anti Influencers

Justamente durante la pandemia hubo un desarrollo acelerado de personas creadoras de contenidos audiovisuales que publicaban reseñas de productos o servicios en Instagram dirigidos a miles, cientos de miles y hasta millones de seguidores. Convirtiéndose en influencers particulares y que pronto las marcas se percataron de lo útil que pudieran llegar a ser para captar un nuevo publico para convertir en cliente.

Contratar influencer independientes trae consigo una cierta dosis de riesgo. Y es que poner la marca en manos de un influencer también abre la posibilidad de que se presenten crisis de reputación. Las redes sociales han provocado que esta posibilidad sea más factible que nunca. 

La nueva tendencia generada por los desinfluencers es la muestra.

A grandes rasgos es todo lo contrario a un influencer desde el punto de vista de promoción de marcas.

Si un influencer habla de las bondades y ventajas de un producto de una empresa que lo contrató. Haciendo un unboxing (grabar en un video la experiencia de adquirir un producto desde el envío, hasta su uso y aplicación). El desinfluencer desde un punto de vista en principio altruista y transparente se dedican a describir marcas y productos que los han decepcionado, detallan aspectos negativos y razones por las que consideran que no los recomiendan.

Para algunos son unos simples "haters” que sólo critican y solo realizan ataques de lo que no les gustan. Para otros desde su posición crítica, resulta valioso para el mercado ya que aportan honestidad, transparencia y conocimiento de causa sin buscar nada a cambio.

Esto está "afectando” los intereses de marcas reconocidas y posicionadas en el mercado y están dando paso a otras con menor posicionamiento o incluso a recomendar el desuso de ciertos productos por considerarlos superfluos o sustituibles con remedios caseros o por productos sustitutos de mucho menor precio.

Los desinfluencers son en cierto modo una llamada de atención a las áreas de marketing de las empresas para elegir estrategias más sostenibles en redes sociales y observar más allá del resultado aparente de campañas de marketing en redes sociales.

En LIDER EJECUTIVO MX nos hemos especializado en la ejecución de la estrategias de Influencer Marketing desde una perspectiva única. El mejor influencer para tu negocio es un cliente satisfecho.